viernes, 11 de marzo de 2011

Terminalidad educativa en el nivel secundario: la obligatoriedad tiene fundamento

InfoBAE, 09-03-11
En Argentina, menos de la mitad de los alumnos terminan el secundario



Según un informe al que accedió Infobae.com, el país tiene uno de los índices más bajos en América Latina con relación a la cantidad de estudiantes que egresan del secundario: 43 por ciento. En Perú y en Chile, lo hacen el 70% de los alumnos. Desde 2003, se ve una caída de las matrículas en escuelas públicas


En la Argentina, sólo el 43% de los alumnos que comienza con la educación secundaria la termina, de acuerdo a un informe publicado por el Instituto Di Tella. Es decir, menos de la mitad de los inscriptos llega a completar los doce años que conforman el ciclo primario y el secundario.









Esto posiciona al país en uno de los puestos más bajos en América Latina, por debajo de Bolivia, Paraguay y Ecuador. Los mejores ubicados son los peruanos y los chilenos, que cuentan con un 70% de estudiantes que completan el ciclo.







Dada la falta de cumplimiento de las leyes educativas, los padres optan cada vez más por enviar a sus hijos a colegios privados, en un claro éxodo de la escuela pública.
A partir de 2003, la matrícula estatal registró una caída sostenida, que ha disminuido en 250.000 alumnos. La ciudad de Buenos Aires cuenta con 127.000 alumnos menos; Santa Fe, con 32.000; Mendoza, con 20.000; y Córdoba perdió 15.000 alumnos en las escuelas públicas. Esta huida de la educación estatal provoca la subida de las matrículas en los colegios privados, que en el período 2002-2009 aumentaron un 18 por ciento.
La región metropolitana es la que cuenta con el mayor número de asistentes a centros educativos privados. El 52% del estudiantado concurre a este tipo de escuela en detrimento de las públicas. El Conurbano y la provincia de Buenos Aires le siguen en el listado, con 40 y 35% de asistencia a colegios privados, respectivamente. Entre las zonas con menor asistencia están Formosa, Chaco y La Rioja.
En tiempos en que, dadas a las carencias en cuanto a oferta de trabajo y a las diferentes competencias laborales, el diploma de la educación secundaria aparece como una necesidad, pero nunca es suficiente.
Respecto de los niveles de graduación universitaria, los números tampoco son muy alentadores. Mientras que en países como Islandia el 66% de los estudiantes alcanza el título universitario, en nuestro país sólo lo hace el 14%, de acuerdo con un informe publicado por la Unesco.
De la región latinoamericana el mejor ubicado en Panamá, que cuenta con una taza de graduación universitaria de 25%.

Otro ejemplo de la necesidad de contar con una ley penal juvenil que contemple alternativas razonables a la mera privación de la libertad

Clarín, 18/08/10, PorLiliana Caruso
Es culpable, pero aún no se sabe el monto de la pena. El imputado mató a su víctima cuando aún era menor y seguirá detenido en un instituto.
Un joven acusado de haber asesinado al estudiante de Arquitectura Mariano Iannetta, y de haber dejado hemipléjico a su padre durante un asalto en agosto de 2009, fue hallado culpable. Pero el Tribunal de Responsabilidad Penal Juvenil de San Martín resolvió dejar en suspenso el monto de la pena.
De esta forma el adolescente, que era menor al cometer el delito pero que ya cumplió los 18 años, estará detenido en un instituto de régimen cerrado hasta que termine lo que se llama “tratamiento tutelar”, y que supone una rehabilitación para él.
“El joven fue hallado responsable del crimen, ya tiene la mayoría de edad, pero falta que cumpla con el tratamiento tutelar dispuesto por el artículo cuarto de la ley 22.178, que reglamenta un año de terapia de recuperación antes de que sea pasible de una eventual condena privativa de la libertad.
Igual ese plazo se vence en breve ”, explicó el secretario del Tribunal, Ramón Bogado Tula. Según pudo saber Clarín , ese lapso vence para el joven a fin de este mes. Sin embargo, como su abogado defensor adelantó que apelará el fallo condenatorio , es probable que la pena a cumplir se conozca más adelante.
La condena fue impuesta por el Tribunal de Responsabilidad Juvenil 2 de San Martín, que le imputó al joven los delitos de homicidio criminis causa (matar para ocultar otro delito), robo calificado e intento de homicidio contra el padre de Iannetta, quien resultó herido y quedó hemipléjico. El hombre, además recibe tratamiento neuropsiquiátrico porque nunca pudo asumir la muerte de su hijo. El Tribunal también juzgó al joven por otro robo calificado con uso de arma y resistencia a la autoridad .
Los jueces de San Martín fallaron de la misma forma que lo hiciera, el 18 de julio, el Tribunal Penal Juvenil 3 de San Isidro por el asesinato de Santiago Urbani. Allí los jueces difirieron la pena a dos menores que tenían 16 años al cometer el asesinato para cuando cumplan los 18. Pero a diferencia del fallo de ayer, en el que los jueces mantuvieron la acusación del fiscal, los de San Isidro modificaron la calificación del delito a homicidio en ocasión de robo, un delito penado con 10 a 25 años de prisión. Al juicio de ayer asistieron allegadas a la familia Iannetta. En un breve diálogo con Clarín sólo dijeron la salud del papá de Mariano “ sigue delicada ”.
Un pedido para no criminalizar a los jóvenes
Para la Iglesia, la sociedad debe hacerse cargo efectivamente de los menores que delinquen y no “criminalizar su conducta”. Así lo dijo el vocero del Episcopado, padre Jorge Oesterheld, durante un alto de la reunión de la cúpula eclesiástica.
Tras admitir que los obispos, como el resto de la sociedad, están muy preocupados por la inseguridad, señaló frente al aumento de delitos que tienen como protagonistas a menores que éstos “viven en un clima de violencia y aprenden la violencia”.
En ese sentido, consideró necesario “no tener que llegar al punto de criminalizar sus conductas, aunque sean capaces de matar”. Y redondeó: “Hay que encontrar la manera de contenerlos porque son menores y es la sociedad la que se tiene que hacer cargo”.